Hace un par de noches, y después de 135 horas de juego, terminé Xenoblade Chonicles. Al finalmente poder cerrar el juego, me quedé con una serie de experiencias que, seguramente, cargaré el resto de mi vida. Este juego, es un magnífico representante del Nintendo Wii, y nos demuestra todo el potencial que nadie se atrevió a explotar con tanta valentía como lo hizo MonolithSoft. Desde su aspecto técnico, hasta su trascendencia en el jugador, está colmado de detalles que enriquecen la historia y fortalecen el vínculo entre el juego y el jugador, estos son algunos de los que me gustaría compartir con ustedes.
Mucho de lo que más me dejó impresionado de esta tremenda entrega, es el diseño de niveles. Increíblemente elaborados, repletos de pequeños y minuciosos exquisitos detalles, que sumados le dan una personalidad propia a cada escenario por el que te conduces. El discreto movimiento de las plantas, el avanzar de los ríos, el reflejo de los lagos; los escenarios presentan un ecosistema completo, que te permitirá entender, sin hacer demasiado hincapié en ello, qué hace cada uno de sus habitantes en el lugar donde se encuentran. Debo decir, sin temor a equivocarme, que la experiencia que te deja recorrer los mapas es la de encontrarte en ambientes naturalmente perfectos.
Otro de los efectos que considero más asombrosos del juego, es el paso que le da el día a la noche, acompañado de un clima variante que te envuelve en una sensación temporal como ninguna otra: pasar de un día despejado con un sol caluroso, a una nublada tarde que, con las horas, se convierte en tormenta antes del anochecer, para finalmente apreciar el manto de luminosas estrellas que te regalará una clara madrugada. Así, no podrás rechazar la invitación a disfrutar de la vista del lejano titán, Mekonis, envuelto en las brillantes estrellas que se desvanecerán cuando el alba le de paso a un majestuoso nuevo día.
El apartado musical es sencillamente sensacional. Desde la pantalla de inicio serás recibido por un espectacular tema principal, al que sin duda, te darás el tiempo de dejar a un lado tu control y escucharlo por varios minutos antes de que decidas continuar tu partida salvada. A él se le irán agregando más temas deleitantes, como el de la pronta Pierna de Bionis, el cual te invitará a explorar cada rincón del basto escenario, transmitiéndote -al ritmo de sus percusiones- un entusiasmo que solo podrás calmar cuando hayas terminado de descubrir cada uno de los rincones de la extensa y salvaje llanura. Y continuarás descubriendo, con la evolución de tu avance por los niveles del juego, más temas musicales que te dejarán sorprendido; cada ciudad, cada escenario, cada enemigo, cada hito en la historia del juego vendrá acompañado de un temática musical ideal para transmitirte con perfección el sentimiento de tus personajes y hacerte cómplice de las decisiones que cada de ellos irá tomando al margen de sus respectivas concecuencias.
Xenoblade Chronicles es de esos poco juegos que tienen el honor de dejarte el deseo permanente de revivir su vertiginosa historia a través de su música.
Las mecánicas de juego, por su parte, son extenuantes. La simple generación de experiencia a través de los combates con tus enemigos no es suficiente para asegurarte que la historia la podrás desenvolver con facilidad. Es más, los combates ni si quiera son la forma primaria de recabar la experiencia que necesitas para hacer crecer a tus personajes; en su lugar, encontrarás cientos de misiones secundarias que te irán pidiendo los pobladores de las ciudades que visites, y que –sin ser necesariamente obligatorias– deberás ejecutar para entender un poco más a detalle el entorno de la historia. Al mismo tiempo, esto hará que te involucres en la vida de cada poblador, a tal grado que sentirás la necesidad de ayudar a la gente a resolver sus problemas más cotidianos como un acto desinteresado de caridad. Cambiar la chapa de una puerta, ayudar a un padre a pasar más tiempo con su hija, darle la noticia a una madre de la muerte de su hijo en combate, o ayudar en la reconstrucción de una ciudad, son algunas de las tareas que te llevarán a que te involucres en el bienestar de los pueblos y de sus habitantes. Al final de cada situación resuelta recibirás una recompensa, que puede ser desde unas breves palabras de agradecimiento, hasta equipo único para mejorar las capacidades de tus personajes.
El verdadero reto en Xenoblade Chronicles, no es, ni será, avanzar y terminar tu juego, sino esforzarte en hacer de cada ciudad que visites, un lugar mejor para vivir.
Hablar a detalle del armamento, equipo, habilidades y mejoras es basto lo suficiente para llenar una guía de juego completa con tabuladores, habilidades especiales y vínculos de poder. Por lo que otra de las grandes complicaciones con las que te encontrarás a lo largo de tu aventura, será la de entender cómo funcionan mejor tus personajes, pues la afinidad que exista entre ellos será la clave para la victoria en los inveitables combates que afrontarás a lo largo del juego. De la afinidad entre ellos, dependerá si puedes usar o no algún tipo de armadura; o si un ataque en cadena se vuelve contundente o apenas logras generar un pequeño daño a tus enemigos. De la afinidad también dependerá la elaboración de gemas, que serán aditamentos para tus armas y armaduras. También, según el grado de afinidad que tengan tus personajes, podrás elaborar íntimas conversaciones, que te permitirán entender un poco de los motivos que tiene cada uno de ellos, para estar en el viaje de esta mítica aventura.
En el aspecto de las líneas de la historia, nada será lo que parece. Tu misión básica, y lo que le dará fuerza a tu personaje principal -Shulk- será la revancha contra un ejército de robots llamados Los Mekon, quienes azotaron tu ciudad natal “Colonia 9” con una gran cantidad de bajas y daños materiales. No es sino la pérdida de un ser querido, en el más reciente ataque Mekon, lo que llevará a Shulk a buscar venganza y desafiar las ordas de robots opresores; sus convicciones serán la clave para desenvolver este maravilloso viaje a través de Bionis el estrepitosamente inmenso e inherente Titan en donde Shulk y sus amigos son residentes.
Para su protección, Shulk utilizará la ancestral espada Monado; la cual guarda una serie de secretos que se irán develando poco a poco y uno a uno, conforme debilites las fuerzas del ejército Mekon y te sean expuestos los motivos de la avanzada enemiga.
Xenoblade Chronicles, como juego, te regala un aprendizaje valioso y reflexivo, colmado de experiencias que saltan desmedidas de la pantalla al videojugador, transformándose en experiencias dignas de replicarse en el nuestro mundo real, experiencias que nos permitan salir a la calle y mirar al cielo con alegría, sabiendo que en el fondo, lo vivido a través de este título sembrará en nosotros el deseo de hacer de nuestro mundo, un mejor lugar para vivir.
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